A estas alturas, uno ya se pregunta si a la derecha de nuestro pueblo le interesa o no nuestra independencia.
Con Alaminos todo fue a pasos agigantados-diría yo-.Lo dejó todo preparado para que, en 5 años, demostrásemos que queríamos y podíamos ser independientes.
El mandato de Juan Solís transcurrió dentro de esos 5 años de transición necesarios por ley para poder solicitar la segregación y fue el período en el que se traspasaron importantes competencias y se lograron las mayores inversiones para Tesorillo-hechos que se pueden constatar.
Pero en los años siguientes…
Analicemos un poco:
- Expulsión de los locales de la ELA de los servicios que prestaba el Ayuntamiento.
- Posteriores e interminables enfrentamientos con el Ayuntamiento y el Partido
que lo sustenta.
- Permisividad de los mayores desmadres urbanísticos de la historia de nuestro
pueblo, con consecuencias desastrosas para muchos de nuestros convecinos.
…Y más y más que alargarían en exceso este comentario… Pero voy a mi reflexión.
¿Se pueden interpretar estos hechos como una actitud destructiva para el futuro trato con “municipio vecino”? ¿También como una flagrante demostración de incompetencia para el autogobierno?
Si así se considerasen, ¿qué gobernante competente nos otorgaría sin más la deseada independencia y el honor de convertirnos en el octavo municipio del Campo de Gibraltar?
Y, lo más grave…¿Puede favorecer todo esto a los deseos “anti-independentistas” que se le atribuyen a Jimena? ¿Y de ahí que su Alcalde diga que sí a la segregación respaldado por la convicción de que Junta dirá que no a esa incompetencia demostrada?
Al proyecto de ley en elaboración me remito.
Por favor, que no se justifiquen ni unos ni los otros con la construcción del Hogar del Pensionista- que ya nos tocaba por derecho dentro del programa de construcciones de este tipo de Centros que dirige la Diputación Provincial-.
Y tampoco con las actuales obras que se realizan gracias al Plan Zapatero o a la política de obras de la Empresa de Aguas, que también era hora ya de que nos tocara.
¡SALUDOS POR LA INDEPENDENCIA!
José María Casuso
Con Alaminos todo fue a pasos agigantados-diría yo-.Lo dejó todo preparado para que, en 5 años, demostrásemos que queríamos y podíamos ser independientes.
El mandato de Juan Solís transcurrió dentro de esos 5 años de transición necesarios por ley para poder solicitar la segregación y fue el período en el que se traspasaron importantes competencias y se lograron las mayores inversiones para Tesorillo-hechos que se pueden constatar.
Pero en los años siguientes…
Analicemos un poco:
- Expulsión de los locales de la ELA de los servicios que prestaba el Ayuntamiento.
- Posteriores e interminables enfrentamientos con el Ayuntamiento y el Partido
que lo sustenta.
- Permisividad de los mayores desmadres urbanísticos de la historia de nuestro
pueblo, con consecuencias desastrosas para muchos de nuestros convecinos.
…Y más y más que alargarían en exceso este comentario… Pero voy a mi reflexión.
¿Se pueden interpretar estos hechos como una actitud destructiva para el futuro trato con “municipio vecino”? ¿También como una flagrante demostración de incompetencia para el autogobierno?
Si así se considerasen, ¿qué gobernante competente nos otorgaría sin más la deseada independencia y el honor de convertirnos en el octavo municipio del Campo de Gibraltar?
Y, lo más grave…¿Puede favorecer todo esto a los deseos “anti-independentistas” que se le atribuyen a Jimena? ¿Y de ahí que su Alcalde diga que sí a la segregación respaldado por la convicción de que Junta dirá que no a esa incompetencia demostrada?
Al proyecto de ley en elaboración me remito.
Por favor, que no se justifiquen ni unos ni los otros con la construcción del Hogar del Pensionista- que ya nos tocaba por derecho dentro del programa de construcciones de este tipo de Centros que dirige la Diputación Provincial-.
Y tampoco con las actuales obras que se realizan gracias al Plan Zapatero o a la política de obras de la Empresa de Aguas, que también era hora ya de que nos tocara.
¡SALUDOS POR LA INDEPENDENCIA!
José María Casuso